DAOs
#InformeLanaspa
A principios de este año estuvimos hablando sobre cómo Internet, si lo observamos como un producto completo en si mismo, a vista de pájaro parece estar comenzando a evolucionar hacia la Web3.
Resaltábamos que el foco de la Web3 radica en continuar con el principio inicial descentralizador de la red de redes pero sin perder las facilidades de interacción para los usuarios finales de la web 2.0.
El concepto de descentralización juega un rol muy importante en esta nueva iteración de Internet y de esta tendencia nace también el sueño de gestión de organizaciones de manera descentralizada, las DAOs.
Qué es una DAO
DAO significa Decentralized Autonomous Organization, organizaciones que son capaces de operar bajo una jerarquía descentralizada.
Organizaciones en las que cualquier gestión de los recursos (dinero por ejemplo) o decisiones que se haya de tomar (en qué se debe trabajar, por ejemplo) se realiza en base a votaciones de los miembros.
Cada DAO establece de manera inicial unas pautas mínimas de participación o peso en las votaciones de los miembros apoyándose en la utilización de tokens que se van asignando en base a aportación de capital a la organización o trabajo desempeñado dentro de la misma por ejemplo.
Las DAOs se apoyan tecnológicamente en las capacidades de la Web3 que permite la creación de Smart Contracts, que no son más que pequeñas lógicas de negocio que quedan grabadas en una blockchain con dos principales objetivos:
- Por un lado, garantizar la ejecución de las decisiones tomadas de manera automática, por ejemplo, que tras una votación de reparto de recursos directamente los recursos se repartan en la dirección votada.
- Por otro lado, que todas estas decisiones de la organización queden visibles de manera totalmente transparente para siempre para toda la red.
Las DAOs propician un cambio de paradigma en la gestión económica de las organizaciones. Ofrecen total transparencia, aseguran el control en base a la posesión de tokens (de accionistas o trabajadores) y garantizan gobernanza autónoma.
Una vez creada la DAO, cualquier persona es libre de unirse a la organización o de irse de ella en cualquier momento, pudiendo influir o trabajar en la misión de la DAO teniendo acceso en todo momento a los princpios de la organización y al histórico de decisiones tomadas previamente.
Aragon project
Para facilitar la creación de estas organizaciones sobre la Web3, se están desarrollando herramientas que permitan de manera rápida crear y gestionar DAOs.
En mi caso, durante estos últimos días comentaba por Twitter que he estado jugando con el cliente de Aragon para generar distintas DAOs. Pero Aragon project no es la única herramienta existente para crear DAOs.
Este tipo de clientes permiten crear DAOs a golpe de click con una experiencia de usuario cuidada y encapsulando toda la complejidad de gestión interna de los Smart Contracts y publicación en Ethereum que queda totalmente trasparente a los usuarios.
Esto es un gran ejemplo de como funcionarán las DApps en la Web3, manteniendo la facilidad de uso para el usuario final pero con un cambio de infraestructura brutal por debajo que queda totalmente transparente para el usuario, que le permite realizar acciones y trabajar de formas que hasta ahora no eran posibles.
El futuro
Existen muchísimos recursos muy bien escritos que versan sobre el futuro de las DAOs, donde se les sitúa como las organizaciones del futuro para gestionar fondos de inversión de manera mucho más transparente entre los partícipes, como vehículos de creación de contenido evolucionando los modelos basados en suscripción o gestión de proyectos software open-source entre otras cosas.
Más allá de las posibles aplicaciones futuras de las DAOs, para mi, las preguntas claves son más de corte sociológico y humano…
¿Somos capaces como seres humanos de trabajar bajo organizaciones descentralizadas? ¿Son realmente este tipo de organizaciones más eficientes que las organizaciones tradicionales a las que estamos acostumbrados? ¿Todo tipo de misión puede organizarse de manera descentralizada?
Un gran camino por recorrer para unas DAOs que aún están en fase premarket-fit, buscando su hueco en este mundo tan complejo. No las perdamos de vista, quizás alguno de nosotros acabe trabajando en una de ellas antes de lo que imaginamos.